Detrás de los cantes...

Intentando sobrevivir a esto de opositar, compartiendo este arduo camino salpicado de anécdotas, experiencias y buen humor, para evitar perder la cabeza, ¿te apuntas?

AVISO: Queda prohibida cualquier tipo de reproducción total o parcial de cualquiera de los posts de este blog. Gracias por respetar el trabajo de los demás.



viernes, 31 de mayo de 2013

Hoy, una opositora a Secretarios Judiciales

Me parece mentira estar pidiendo gente de otras oposiciones para que nos hablen de ella y que yo aún no haya pensando en escribir sobre la mía y sobre mis "porqué", ya que, al fin y al cabo, nadie lo ha hecho y, doy fe (que para eso estoy estudiando esta oposición, para dar fe) de que mucha gente no tiene ni idea de qué va el opositar al Cuerpo de Secretarios Judiciales (antes de que pasemos a ser "Letrados al servicio de la Administración de Justicia", que suena... pufff, sin comentarios).

Voy a seros sincera desde un principio: el nombre de "secretaria judicial" no suena a oposición del grupo A1, ni suena a tener responsabilidades. Se suele subestimar esta figura, fuera pero también dentro de los juzgados, creyendo que jueces y fiscales son los "reyes del mambo". Es más, no es raro encontrarse a gente que habla de los secretarios judiciales como si de verdad fueran los "asistentes" del juez, y os hablo de gente Licenciada en Derecho. Me han llegado a preguntar "cuántos secretarios tiene un juez". En esos momentos, respiro hondo (que tras tantos post, os habréis dado cuenta de que es muy mío) y lo intento explicar brevemente.

El secretario judicial es el director de la oficina judicial, fedatario público y tiene como deber impulsar el procedimiento. Básicamente, da fe de todas las actuaciones del juzgado (de forma más o menos directa) y organiza. Como bien me dijo un opositor hace unos días: "vamos, que se trata de montar todo el "cotarro" pero sin decidir al final, y sin llevarte la gloria". Y todo esto se resume en una materia de Derecho: Procesal.

Si no te gusta procesal, no te metas a Secretaría Judicial, porque tu vida laboral va a girar en torno a ello: citaciones, emplazamientos, plazos, requisitos formales...

El temario es similar al de jueces y fiscales, muchas veces los temas incluso son agrupaciones de los del temario de judicatura, si bien en ciertas materias el temario de secretarios se olvida de todo lo demás y se va al procedimiento (contencioso-administrativo, social, civil...) puro y duro, y desde el punto de vista del propio secretario. Examen tipo test de 100 preguntas (constitucional, comunitario, mercantil, penal, administrativo, laboral y registro civil), oral (4 preguntas, una hora, tres de procesal, y una de civil) y práctica (en la que te puede caer cualquier supuesto relacionado con el temario). En mi caso, mi preparador me pide que cante todos los temas, incluyendo los de test, de forma que esos cantes son de entre 15 y 30 minutos (y habría temas más largos, pero le agradezco que no suela elegirlos), pero los de oral, se cantan entre 17-18 minutos para el día de la verdad ante el Tribunal puedan quedar entre 14-16 minutos.

Brevemente, ¿por qué la elegí? Desde que era una mico quería ser jueza; realmente estudié Derecho por vocación y ADE por amor al arte, y no considero una pérdida de tiempo haber hecho dos años más por sacarme una Doble Licenciatura aún teniendo claro que quería opositar. Pero a lo largo de la carrera me di cuenta de que realmente lo que se me da bien y me gusta es estar detrás y organizar. A la mayoría ni os sonarán nombres de Secretarios Judiciales, mientras que Jueces y Fiscales los hay cada día en la prensa. Yo no quiero gloria, no quiero casos históricos y trascendentes. Quiero colaborar con esta sociedad intentando aportar mi ayuda a una Justicia eficaz y eficiente, hacer las cosas rápido pero bien para poder solucionar conflictos, que se cumplan los tiempos, que los procesos puedan salir hacia delante, que no haya gente que se libre por un fallo en forma o plazo. 

Y, sin más, os mando ánimo y un saludo, y gracias por seguirnos y colaborar en nuestro blog.

Irene C. Pinilla, @icpinilla

miércoles, 29 de mayo de 2013

Sobrevivir a un "día de fiesta"

Primer paso: Mentalízate, no vas a saber lo que son días de fiesta o puentes en el tiempo que dure la oposición. Si lo tienes claro desde el principio es mucho más fácil para no cabrearte cada vez. Cuando eres opositor tienes la sensación de que, entre festivos nacionales, de las CCAA y locales, en este país hay mucho más cachondeo del que tú recordabas de tu época de estudiante. Te van a mirar mal si empiezas a decir en alto que deberían quitar festivos.

Segundo paso: Resignación, resignación y más resignación. A tu preparador le da igual que tu familia pretenda celebrar algo, que tus amigos se vayan al campo o a la feria o que tú tengas la tradición de montar en los caballitos de las fiestas de tu pueblo cada año desde que cumpliste los 3. No es día libre, no insistas porque encima los preparadores cuando se lo decimos, se lo toman por broma y se ríen en nuestra cara.

Tercer paso: No te quejes muy alto, que puede ser peor, ni te rías de otros opositores que encima tienen que cantar ese día. El próximo festivo te puede tocar a ti estar preparando el cante o estudiando con gente de botellón bajo la ventana de tu opozulo o un grupo folclórico cantando en la plaza de tu barrio alguna de la Pantoja.

Cuarto paso: Que tengas que cantar en festivo no aparece (aún) en el Código Penal como eximente de responsabilidad, ni siquiera como atenuante. Bueno, quizá puedas justificar que fue arrebato u obcecación el tirar tu Código de Comercio (y otro más gordo, si lo tienes) a la cabeza de tu hermano pequeño por decir que eres un amargado sin vida social que se morirá entre libros. Déjalo, ignora a la gente, repasa, canta y métete debajo de la manta el resto del día, que pase rapidito.

Quinto paso: Asume que todos tienen el día libre, especialmente tu familia. ¿Y sabes qué es lo peor? Que en el 90% de los casos tampoco vas a tener una biblioteca abierta cerca a la que huir. No puedes evitar que tu hermana mayor entre y salga buscando un CD que te prestó hace 3 años pero se le ha antojado escuchar hoy. No puedes evitar que tu madre aparezca una vez cada hora para preguntarte si quieres algo, si has desayunado bien, si vas a comer, a qué hora, si tienes agua... Y la mejor pregunta: "¿estás estudiando?", para lo cual me remito a un sexto paso.

Sexto paso: Respira hondo y cántate aquello de "uno, dos y tres, cuatro, cinco y seis, yo me calmaré, todos lo veréis" porque sí, te acaban de preguntar si estás estudiando y no, esto tampoco exime de responsabilidad. La gente tiene la absurda sensación de que estudiar no es tan duro, tan lento ni tan complicado. Y en los días de fiesta, no entienden por qué tienes que estudiar. Así que evita tener objetos punzantes en tu mesa, cierra los ojos e imagínate lejos.

Último paso: El festivo/puente se acaba y mañana será otro tranquilo día con todo el mundo yendo a trabajar (o donde corresponda). ¿Quieres vengarte? Ponte el despertador a la hora que alguien de tu casa esté ya vestido para irse, levántate sosegado y en pijama, prepárate un café y di "Me vuelvo otro rato a la cama, que ayer me cundió mucho. ¿Tú a dónde vas? Ah, sí, se te ha acabado el día libre." Márchate haciendo la croqueta y pensando que cuando esa plaza sea tuya, serás el primero en disfrutar de cada festivo, vacaciones y "moscosos" que te puedas coger ;)

Irene, @icpinilla

viernes, 17 de mayo de 2013

Lucha.


Esto no se trata de una gratificación instantánea. Hay que trabajar duro para ello, sudar por ello, dejar de dormir las mañanas de domingo
Lauren Fessenden


Quizá estés hoy desmotivado, quizás sea mañana el día de bajón. Pero mira a tu alrededor y fíjate en alguien que esté dedicándose a lo que le gusta. Tendrá días cansados, como todos, pero pregúntale: nunca te negará que está satisfecho con su vida, nunca te dirá que no ha merecido la pena todo lo anterior, bueno y malo, para llegar a trabajar en lo que quiere.

Hoy no me refiero sólo a opositores sino a gente que está estudiando Másters o Expertos para señalizarse, no ser uno más en su profesión; gente que está de becario en condiciones reguleras pero que, al fin y al cabo, son experiencia y currículum; gente que, incluso, no ha optado por una titulación universitaria porque quiere dedicar su vida a la moda, la música... Todos los ejemplos me valen para deciros: La vida no es fácil. No os van a regalar nada que merezca la pena ni todo es un camino de baldosas amarillas. Pero aprovechad las oportunidades que tenéis de superar obstáculos e intentar llegar a donde queréis. Hay cosas mucho más graves en esta vida que una modificación legislativa o que un "tema x" que no te guste.

Así que vuelve a ponerte delante del libro o los apuntes y lucha. ¿Sacan sólo 5 plazas? Intenta ser de los 5 mejores. ¿Este tema no te gusta? Abre la mente, respira hondo y piensa que cuanto menos vueltas le des al "no me gusta, no me entra", menos tardarás en quitártelo de en medio. ¿Modifican una ley? Sistematiza los cambios y estudia el tema de nuevo. ¿Tienes un mal cante? Mañana será otro día, esfuérzate para resarcirte en el siguiente. ¿Estás cansado? Para, descansa, da un paseo y aclárate la mente, que no eres una máquina de baterías infinitas. 

Pero no pierdas de vista tu objetivo y, si de verdad lo quieres, deja de quejarte, y lucha por llegar.

Irene, @icpinilla


domingo, 5 de mayo de 2013

Feliz día: Madre de opositor, vale por dos.

Breve post dedicatorio, más que nada.

¡Feliz día a las madres de opositores, que nos aguantan en nuestro mal humor, que invierten (y mucho) en nosotros, tienen fe en nuestras posibilidades más allá de lo que ninguno imaginamos y no se rinden!
 ¡Gracias, de corazón, por ser tan grandes!


AVISO: Queda prohibida cualquier tipo de reproducción total o parcial de cualquiera de los posts de este blog, bajo pena de procedimiento penal.
Gracias por respetar el trabajo de los demás.