Hoy vamos a hablar de malas costumbres de opositores, no estudiando, sino respecto a actitud. Lo hago un poco en clave de humor pero sin olvidar que a veces a los demás les sienta mal y tenemos que agachar la cabeza. Igual que las personas que nos rodean hacen y dicen cosas que nos molestan (y ya escribí yo misma sobre aquello de "cosas que no aguantamos los opositores"), nosotros a veces también pecamos en ese aspecto. Por ejemplo...
¿Falta de humildad? ¡Mmmmmmmec! ¡Error!
Eres un pobre opositor más, al que le queda mucho camino por recorrer, mucho que aprender y muchas piedras que superar. No intentes poner por encima de los demás ni tus cantes en tiempo, ni tu literalidad, ni tus métodos de estudio... Cada cual a lo suyo, porque también está feo... (seguir leyendo)
Eres un pobre opositor más, al que le queda mucho camino por recorrer, mucho que aprender y muchas piedras que superar. No intentes poner por encima de los demás ni tus cantes en tiempo, ni tu literalidad, ni tus métodos de estudio... Cada cual a lo suyo, porque también está feo... (seguir leyendo)
¿Compararse con otros opositores/oposiciones? ¡Mmmmmmmec! ¡Error!
Ni por arriba, ni por abajo. Las comparaciones son odiosas y no van a ningún sitio. Malo es compararte con gente de tu misma oposición, que lleva más o menos el mismo tiempo, y decirle que tú llevas más temas a la semana, o has sacado más nota en el examen... Su preparador puede organizarlo de otro modo, puede tener problemas personales que le impidan avanzar a más ritmo, puede ser simplemente que sí, tú llevas 4 temas nuevos y el otro 3, pero él esos tres los haya interiorizado mejor por dedicarles más tiempo y en segunda vuelta necesiten una hora para repasarlos y tú necesites dos. Pero además ¿compararte con otras oposiciones? Si no conoces su temario, ni su examen, ni todo lo que he mencionado antes... ¡Ni lo intentes! Es como comparar entre carreras en la universidad (explica tú a uno de Ingeniería que Derecho también es complicado porque no sólo es una carrera "de codos"...) Puedes discutir con quien quieras, pero ninguno tendréis razón diciendo que una oposición es más complicada que la otra. Son distintas, punto.¿Pretender que la vida de todos gire en torno a tu oposición? ¡Mmmmmmmec! ¡Error!
La vida de los demás no se para porque tú estés opositando. Es cierto que tus amigos o familia a veces celebrarán algo o prepararán cosas teniendo en cuenta que te toque o no estudiar. Pero no es su deber, lo hacen porque quieren, y no puedes pedir, ni mucho menos exigir, que siempre te esperen o cuadren todo por ti. A veces, simplemente, si puedes ir bien y sino, también, porque los demás también tienen vida, trabajo, estudios, planes... No puedes echárselo en cara, hacen miles de cosas por ti, seguro. Pero quien oposita eres tú, no los demás.
¿Justificar el mal humor con "estoy pre-cante"? ¡Mmmmmmmec! ¡Error!
Esto de opositar ha sido tu elección y si cada vez que vas a cantar estás de mal humor y lo pagas con todos, el día que te toque examinarte nadie querrá estar aguantándote. Irás más o menos seguro al cante pero no lo pagues con todas esas personas que están ahí para apoyarte y animarte. Y ni por un segundo te creas que un "estoy de precante" te quita respolsabilidad. Si metes la pata por estar nervioso (que a todos nos pasa alguna vez) pide disculpas.
¿Creer que sabes cómo va un juicio/inspección/registro de verdad? ¡Mmmmmmmec! ¡Error!
Has estudiado la teoría. Ahora espera que te llegue ver la práctica desde dentro, sé humilde y escucha a todos los que puedan aconsejarte.
¿Considerar al resto "competencia"? ¡Mmmmmmmec! ¡Error!
O al menos, error a medias. El examen lo vas a aprobar o suspender tú solito. Considerar a los demás compañeros es mejor opción: estarán ahí cuando necesites ayuda (con los temas o con bajones de humor) y te sentirás bien (si eres medianamente normal) echando una mano a los demás. No están ahí para ponerte la zancadilla ni robarte "tu" plaza, lucháis en igualdad de condiciones y a la meta llegue el que tenga "la alineación de las estrellas" a su favor (buen estudio pero también con un poquito de suerte con las preguntas, está claro).
Y sin que os dé vergüenza o reparo que alguien se dé por aludido, ¿qué más detestáis de los opositores a veces? ¡Sin rencores! Que en conductas de estas caemos todos, sin excepción, en algún momento.