Detrás de los cantes...

Intentando sobrevivir a esto de opositar, compartiendo este arduo camino salpicado de anécdotas, experiencias y buen humor, para evitar perder la cabeza, ¿te apuntas?

AVISO: Queda prohibida cualquier tipo de reproducción total o parcial de cualquiera de los posts de este blog. Gracias por respetar el trabajo de los demás.



viernes, 29 de noviembre de 2013

Do your best

Cuando las redes sociales se llenan de quejas, lamentos y condescendencias con uno mismo, llega el momento perfecto para que alguien pare el tren. Pero no para bajarse. Respirar hondo, cambiar de actividad, de aires y mirar por la ventana de ese tren que, hasta hace momentos, teníamos pensado abandonar o cuyo trayecto contemplábamos con desdén. Si en un viaje lo más interesante, a priori, es la partida (por aquéllo de la ilusión, los planes) y la llegada al destino, es importante hacer que el trayecto sea lo más ameno posible. O lo más llevadero.

Preguntar a cada instante "¿cuánto falta para llegar?" no es, desde luego, la mejor actitud... Si todo marcha bien, se llegará -más tarde o más temprano-. Contar cada kilómetro como un éxito, como una experiencia vivida que merece ser tenida en cuenta. Y si el trayecto no nos está gustando nada... siempre se puede amenizar con música: 


Jauladecemento

2 comentarios:

  1. Encantado de volver a contar con un post de "Jaula de cemento" en este blog. ¡Suerte a ella y a todos los demás para el trayecto!

    ResponderEliminar

¿Qué piensas?

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.

AVISO: Queda prohibida cualquier tipo de reproducción total o parcial de cualquiera de los posts de este blog, bajo pena de procedimiento penal.
Gracias por respetar el trabajo de los demás.