Detrás de los cantes...

Intentando sobrevivir a esto de opositar, compartiendo este arduo camino salpicado de anécdotas, experiencias y buen humor, para evitar perder la cabeza, ¿te apuntas?

AVISO: Queda prohibida cualquier tipo de reproducción total o parcial de cualquiera de los posts de este blog. Gracias por respetar el trabajo de los demás.



viernes, 15 de mayo de 2015

A mí yo futuro

No sé dónde estarás al leer esto, cuánto tiempo habrá pasado ni cómo habrá acabado esta aventura que es opositar. Pero te escribo para que no te olvides...

Para que no te olvides nunca de cómo te sentías mientras estudiabas. Recuerda los días en que pensabas que esto no era para ti, que no tenías fuerzas ni ganas de más, que te acostabas con la sensación de haber perdido una batalla. Esos son los días que hacen que valoremos que la vida no regala nada y no es un camino de rosas.

Y aún así, a la mañana siguiente te obligabas a salir de la cama y enfrentarte a tus miedos. Incluso, algunos días llegabas a sentir que podías lograr volar hasta las estrellas si te lo proponías; la clave era persistir, resistir, levantarse tras cada caída. Las cosas que merecen la pena no suelen ser fáciles. Y la oposición no es una excepción. Son muchos días de sangre, sudor y lágrimas pero, sea cual sea su final, te ha dejado muchas experiencias positivas y lecciones aprendidas. 

No te olvides de las personas que te acompañaron en el camino, aquellas que te reconfortaban cuando la motivación estaba a cero, se acordaban de traerte chocolate cuando estabas subiéndote por las paredes, te preparaban tu comida favorita si te veían cansada o aguantaban tus gritos y lloros injutos cuando tenías un mal día. Hay gente que te ha apoyado sin condiciones ni restricciones durante la oposición, que se merecen un verdadero monumento.

Y, ante todo, no olvides, y aunque esté feo decirlo y lejos de ser humilde... Eres valiente. Hay que serlo para regalar años de tu vida a estudiar sin garantía alguna; hay que serlo para elegir rutina y sacrificio; hay que serlo para continuar después de cada batalla perdida. 

No te olvides de cómo llegaste a dónde estás.

"El que olvida el punto de partida pierde fácilmente la meta." 

photo credit: Dawson County, Texas via photopin (license)

2 comentarios:

  1. Lo conseguiras y seguro que habrás aprendido esto y muchas más cosas!

    ResponderEliminar
  2. Madre mia...como me vienen de bien estas palabras ahora mismo.. gracias!!!!

    ResponderEliminar

¿Qué piensas?

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.

AVISO: Queda prohibida cualquier tipo de reproducción total o parcial de cualquiera de los posts de este blog, bajo pena de procedimiento penal.
Gracias por respetar el trabajo de los demás.